7 cañas qu vinieron con una sola tapa, porque eran la 1:30 de la mañana y era lo que le quedaba nomás. Papas fritas, tortilla, chorizo y alguna cosita más.

Ya el pedo que cargábamos era contundente y no anotábamos más nada.

En el bar pelaron una guitarra y una flauta dulce. Se pusieron a cantar un tema de Micky y Los Tonis, que se llama Buribú (o algo así) y que se nos quedó grabada por unas 24 hs.

Mati empezó a rumbear para el hotel porque el Tibu ya pedía cama y porque se quería poner a escribir esta reseña, pero el resto del equipo descubrió un nuevo lugar y metió una última visita etílica.