Facundo decidió que era hora de almorzar. Y salió decidido a encontrar un menú.

Los pinchos son puro marketing. A mi dame comida en un plato. – se lo escuchó argumentar.

Encontró uno a dos cuadras del departamento con menú por 8 euros. Ahí fue cuando abrió los ojitos como diciendo: ¡ES ACÁ!

Pero JP lo convenció de avanzar un poco más así conocíamos algo de la ciudad.

¡20 cuadras caminamos!

Con la momia quemándonos el bocho, porque a medida que nos acercábamos al centro la cosa empeoraba en cuanto al valor del menú.

9… 10… 11,5… 12… 13… 15 euros.

Cuando la cosa pintaba fulera para nosotros, vimos un lugar que nos llamó la atención.

TTUN TTUN

Si bien el Menú estaba a 12 euros, los tipos te daban: primero, segundo, postre, sidra o vino, y café.

Nos estábamos cagando de hambre así que nos fuimos los 8 para el fondo del salón alargado.

Y la verdad… ¡la pegamos!

Porque nos tocó un mozo por demás de copado, llamado Antxón, que nos fue guiando sobre lo que podíamos pedir.

Y comimos todo esto…

PRIMEROS

Marmitako de atún: una especie de puchero con mucho cerdo, atún y bastante pimienta (aunque puede ir con tabasco también, nos dijo el mozo).

Guiso de lentejas con chorizo: nos sorprendió el tamaño de la palangana y la actitud del mozo; “hay más, tu me pides”.

Espárragos con mayonesa. JP volvió a ser JP, pero después de la magia del día anterior el tipo tiene espalda, como un DT nuevo en un equipo del ascenso.

SEGUNDOS

Pescado del Día: que no era del supermercado, sino del día actual. Nos tocó una Lubina. Una carne blanca, muy sabrosa, acompañadas de papas.

Los demás también pidieron: Ternera a la plancha con pimientos, Bacalao con salsa de hongos y Callos con chorizo.

POSTRES

Marchamos todo lo que Antxón nos ofreció: Pastel vasco, Torta de chocolate, Bizcocho de manzana con nueces, Natilla, Profiteroles con nata y Arroz con leche.

La verdad es que comimos super bien. Platos abundantes, con muy buen sabor, todo fresco, algunos platos que nunca habíamos probado y una atención impecable de nuestro amigo Antxón.