Estacionamos y nos metimos en este lugar para comer un pulpo (hacía como 16 horas que estábamos con abstinencia). Queda exactamente frente a los muelles y te atienden rapidito.
Impresionante pulpo.
Acá mismo se decidió que íbamos a pasar la noche en Ribadeo. Alquilamos un departamento, dejamos las cosas y salimos a conocer Ribadeo.