Reseñas

¿Estás buscando un buen Bodegón en Buenos Aires? ¡Estás en el lugar indicado! 

Te dejamos el listado completo de todas las notas que hicimos. ¡Dale dale dale! Los bodegones te necesitan. Salí a recorrerlos y disfrutar de la verdadera gastronomía argentina.


BarReseñas

El Federal

Todos coincidimos: «todavía no te fuiste y ya tenés ganas de volver». Cada uno tuvo un pretexto distinto para justificarlo. Ya sea por h o por b, parece que El Federal tiene un imán antigourmetero. Después de leer esta reseña, te toca a vos hacerte una escapada y elegir tu excusa preferida.

ClubReseñas

Club Gimnasio Parque Chacabuco

Milagros y un lugar secreto atrás de la cocina. El equipo antigourmet reinventó la estructura del morfi, agregando el «plato de entretenimiento» como pieza clave de la degustación. Este club merece otra visita nuestra y una visita tuya.

BodegónReseñas

El Puentecito

Un lugar con 141 años de vida. Pasó por todas las etapas que un lugar antigourmet puede pasar y está colmado de jugosas anécdotas. El Puentecito es un hito para todos los antigourmeteros. Te invitamos a conocer un poquito su historia.

BodegónReseñas

La Tacita

El mejor panqueque de dulce de leche de la historia antigourmetera. ¡Ay, el olor! No, no, no, no, no… dan ganas de aprender a tener sexo tántrico con panqueques, para que dure 74 horas arriba de la mesa sin tocarlo. De otro planeta.

PulperíaReseñas

El Sanjuanino

Un cartel en el local afirma: “Comer es un acto biológico, comer en El Sanjuanino es un acto cultural”. Y no está nada pifiado. Comidas argentinas y un lugar en el podio de las empanadas de carne más ricas de Buenos Aires.

CantinaReseñas

Chichilo

Hablar de Chichilo es sinónimo de «cantina italiana». Con solo decir que una vez, hasta D10s decidió festejar su cumpleaños acá. Imperdible lugar para un anti-gourmet.

CantinaReseñas

Cantina Palermo

La genial Cantina de Arnoldo cerró sus puertas, pero sus mozos lograron reinventarse y ahora llenan de olor a fritanga el barrio de Palermo. Si te considerás un anti-gourmet, comer acá es como ir al spa.

Estos bodegones forman parte del Club Soy Antigourmet